Autor: Leopoldo Andrini
Director: Rene Rogelio Smith
Jurado: Dr. Nicolás Rodríguez León, Mg. María Eugenia Peresutti y Dr. Daniel Heissenberg
Fecha presentación: 22 de octubre de 2015
Introducción:
La organización del calendario académico, que incluye la planificación de los turnos de exámenes finales, es una de las funciones de la conducción académica de las universidades. Esta planificación debe estar diseñada de manera que impacte positivamente en el rendimiento académico de los estudiantes. Este rendimiento académico está influenciado por múltiples variables y no puede ser medido solo por el resultado de los exámenes finales. En el año 2011 la conducción de la Universidad Adventista del Plata incorporó un cambio en el calendario académico, modificando los turnos de los exámenes finales: de cinco turnos con un llamado en cada uno de ellos, pasó a tres turnos con dos llamados al inicio y al final del calendario y uno en el turno de julio.
Objetivo
El objetivo del estudio fue el de identificar si luego de finalizar la actividad de las mesas evaluadoras se observan modificaciones en las cantidades de estudiantes inscriptos, aprobados, desaprobados y ausentes en función de la redistribución de los turnos de exámenes.
Materiales y métodos
La investigación fue de tipo ex post facto. Se trabajó con los registros del sistema académico de la FCS desde los años 2007 a 2015 (febrero-marzo). Estos registros, en formato planilla, contaban con el detalle de los años en los que se llevaron a cabo los exámenes; la modalidad, expresada esta mediante cinco o tres turnos; el llamado, haciendo referencia a si era único llamado como el caso de la modalidad de cinco turnos y primer o segundo llamado en el caso de la modalidad tres turnos. El turno por su parte hacía referencia al mes donde se ubicaba el llamado a examen. Este registro también contaba con la carrera, el curso y el año al que correspondía la asignatura que conformaba la mesa; la asignatura propiamente dicha y el tipo de acta, señalando si los estudiantes serían evaluados mediante la modalidad de condición de promoción directa, condición indirecta o por instrucción previa. Por último se registran los datos cuantitativos de cantidad de inscriptos, aprobados, desaprobados y ausentes.
La muestra se dividió en calendario antiguo representado por los registros comprendidos desde febrero-marzo 2007 a julio 2011 (modalidad cinco turnos) y calendario actual representado por los registros existentes desde diciembre 2011 a febrero-marzo 2015 (modalidad tres turnos). Se aplicaron pruebas paramétricas (prueba t para muestras independientes). Para las pruebas de hipótesis se aplicó análisis discriminante múltiple y pruebas no paramétricas (U de Mann Whitney como alternativa a la prueba t para 2 muestra independientes y H de Kruskal Wallis como alternativa a la prueba ANOVA de un factor) dado que no se cumplieron los supuestos de normalidad y homocedasticidad (p= 0,001 para Shapiro Wilk).
Resultados
Sobre 8068 registros de examen desde febrero-marzo 2007 a febrero-marzo 2015, el 50,88% corresponde al calendario antiguo y el 49,12% al calendario actual. La carrera que mayor cantidad de registros presenta es Medicina. En el calendario antiguo los menores registros de examen se ubican en los turnos de abril y septiembre y en el calendario nuevo en el primer llamado de febrero-marzo.
El porcentaje de aprobación se mantuvo entre el 60 y 80% en todo el periodo analizado, notándose los menores registros en los segundos llamados de los turnos de febrero-marzo del calendario nuevo.
Respecto a los ausentes, en el calendario antiguo los mayores registros se ubican en los turnos de abril y en el calendario nuevo en los segundos llamados de diciembre y de febrero-marzo.
A igual cantidad de estudiantes, la mayor actividad en mesas de examen se registró en el calendario antiguo.
Para la prueba de hipótesis se trabajó con la suma de los registros de cada asignatura en un único registro anual, quedando una base con 1664 registros. Luego, a fin de evitar sesgos, se abordaron solo aquellas asignaturas que habían conservado total o parcialmente la organización de su cátedra y aquellas en las que se habían mantenido bajo la modalidad de promoción directa o bajo la modalidad de promoción indirecta. Se aplicó el análisis sobre 529 registros, no obteniendo suficiente evidencia empírica para rechazar la hipótesis nula de igualdad de rangos poblacionales en los porcentajes de aprobados, desaprobados y ausentes entre los grupos considerados.
Por último las condiciones que mostraron ser más favorables a los estudiantes para la aprobación de exámenes finales fueron aquellas en las que las asignaturas se mantuvieron bajo la modalidad de promoción directa, como así también la que se daba cuando la cátedra había cambiado totalmente.
Conclusiones
La redistribución de los turnos de exámenes finales de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Adventista del Plata no modifica significativamente la condición final de los estudiantes, entendida esta como el resultado expresado en la cantidad de aprobados, desaprobados o ausentes. Esta redistribución sugiere una menor actividad estudiantil en los periodos de examen del calendario actual, probablemente debido a que, en el calendario antiguo, los estudiantes contaban con un mayor periodo de tiempo entre los llamados a examen lo que les permitía presentarse a llamados consecutivos. En la nueva modalidad, especialmente entre los llamados correspondientes a los turnos de febrero-marzo y diciembre, este periodo se ve acotado a una o dos semanas lo que posiblemente motiva al estudiante a optar por uno u otro llamado a fin de asegurar la aprobación; suposición que podría analizarse en futuros estudios.